Ciudad de México.
El Banco de México (Banxico) sorprendió moderadamente al mercado al reducir la tasa de interés interbancaria en 25 puntos base, de 8.5 % a 7.75 %, su menor nivel en tres años. El ajuste —el primero de esta magnitud en 2025 tras cuatro recortes consecutivos de 50 puntos— abarata el crédito y envía una señal de estímulo, pero también despierta interrogantes sobre la fortaleza real de la economía mexicana en medio de un entorno global cada vez más hostil.
Tasa más barata: alivio para el crédito, lupa para la inversión extranjera
Para los CEO y CFO que siguen de cerca el pulso financiero del país, el movimiento implica que financiarse en México será más barato, lo que puede favorecer a empresas con planes de expansión y atraer capital extranjero en busca de rendimientos atractivos frente a otras economías.
Sin embargo, una tasa más baja no significa que la economía vaya viento en popa. Banxico reconoció que la decisión está respaldada por la moderación inflacionaria —3.51 % anual en julio, su nivel más bajo desde diciembre de 2020—, pero también por la “debilidad mostrada por la actividad económica” y la incertidumbre ante cambios en las políticas comerciales globales.
El peso reaccionó con calma: cerró en 18.6050 por dólar, casi sin cambios, borrando pérdidas iniciales. El índice bursátil S&P/BMV IPC avanzó 1.94 %, impulsado por Walmart de México (+6.29 %) e Industrias Peñoles (+5.25 %).
El nuevo orden económico y el reloj que corre contra México
Aunque el país obtuvo 90 días de gracia para evitar los aranceles recíprocos del presidente estadounidense Donald Trump, no hay acuerdo definitivo. La cuenta regresiva hacia finales de septiembre o principios de octubre está marcada por la renegociación del T-MEC, un proceso que podría redefinir el futuro del comercio norteamericano.
En este nuevo escenario impuesto por Washington, la competitividad de México no solo dependerá de su costo de financiamiento interno, sino de su capacidad para blindar el acceso preferencial al mercado más grande del mundo. Cualquier modificación en las reglas de origen, cuotas o aranceles tendría un impacto directo en sectores clave como automotrices, manufactura avanzada, agroindustria y minería.
Oportunidad con riesgo: lo que los líderes empresariales deben leer entre líneas
- Crédito más barato: Ventaja para expandir operaciones, invertir en innovación y mejorar infraestructura productiva.
- Incertidumbre comercial: El diferendo con EE.UU. puede erosionar cualquier ganancia si se encarecen exportaciones o se rompen cadenas de suministro.
- Peso estable, pero vulnerable: La moneda mexicana mantiene resiliencia, aunque un tropiezo en el T-MEC podría provocar una fuerte depreciación.
Banxico dejó claro que podrían venir más recortes si el panorama inflacionario lo permite. Para las empresas, la pregunta no es solo cuánto costará el dinero, sino en qué condiciones podrán vender sus productos y servicios en el mercado estadounidense a partir de octubre.
En un mundo donde EE.UU. está redefiniendo las reglas del comercio, México no puede darse el lujo de confiarse.
Con información del Banco de México y Reuters