La incertidumbre y los aranceles: un nuevo capítulo en el comercio internacional bajo la administración Trump

Más allá de América del Norte, la agenda incluye enfrentamientos con China, para que cualquier intento de invasión de Taiwán sea “demasiado costoso”.

Ciudad de México.

El comercio internacional enfrenta una transformación sin precedentes mientras el presidente electo Donald Trump prepara una serie de políticas radicales que podrían redefinir las dinámicas económicas globales. Desde la creación del Servicio de Impuestos Externos (External Revenue Service) hasta la propuesta de aranceles universales, las señales desde Washington generan incertidumbre entre los principales socios comerciales de Estados Unidos y las empresas de todo el mundo.

El impacto de los aranceles universales

Trump ha prometido imponer un arancel del 25% a todas las importaciones provenientes de México y Canadá, sus mayores socios comerciales bajo el T-MEC. Estas medidas, dirigidas a presionar a ambos países para que adopten políticas más estrictas contra el narcotráfico y la migración, también buscan rediseñar el papel de Estados Unidos en la economía global.

“El T-MEC, creado en una era neoliberal bajo Carlos Salinas de Gortari, es ahora el pilar fundamental de la competitividad de América del Norte. Sin embargo, los aranceles propuestos podrían fracturar esta relación trinacional y afectar gravemente las cadenas de suministro regionales”, afirmó Raúl Treviño, experto en comercio internacional.

El 65% de las empresas estadounidenses encuestadas por Oxford Economics consideran que una guerra comercial global es la mayor amenaza económica para los próximos dos años. Este temor ya ha provocado acciones preventivas: desde la relocalización de cadenas de suministro hasta la acumulación de inventarios, medidas que incrementan costos y generan cuellos de botella en los puertos de ambos lados del Pacífico.

Un panorama empresarial complejo

Empresas como JLab, que ya había trasladado su producción fuera de China durante la primera administración de Trump, ahora enfrentan nuevos desafíos. “Si se aplican aranceles universales, inevitablemente tendremos que subir precios, lo que impactará directamente al consumidor”, señaló Win Cramer, CEO de JLab.

En México, Zipfox, una plataforma que conecta fabricantes locales con importadores estadounidenses, reportó un aumento del 30% en consultas tras la elección de Trump. “Esperar al último momento sería desastroso para las empresas que dependen de cadenas de suministro globales”, advirtió Raine Mahdi, fundador de Zipfox.

El External Revenue Service, anunciado por Trump como un organismo para recaudar ingresos provenientes de aranceles y derechos de importación, refuerza esta narrativa proteccionista. “Hemos gravado nuestro crecimiento para beneficiar al mundo. Es hora de que eso cambie”, declaró Trump en Truth Social.

El guiño de Rubio y la cooperación con México

En un aparente gesto de acercamiento, el próximo secretario de Estado, Marco Rubio, expresó su deseo de colaborar con México en la lucha contra los carteles de la droga. Rubio también planteó la posibilidad de designar a los carteles como organizaciones terroristas, lo que abriría la puerta a nuevas formas de intervención y cooperación binacional.

Esta postura se alinea con el reciente Plan México presentado por la presidenta Claudia Sheinbaum, que busca fortalecer la relación comercial con Estados Unidos y atraer inversiones estratégicas. Si bien las políticas proteccionistas de Trump generan tensiones, este acercamiento podría ser una oportunidad para redefinir las bases de colaboración entre ambas naciones.

Otros frentes: China, Rusia y Cuba

Más allá de América del Norte, la agenda de Trump y Rubio incluye enfrentamientos con China, presionando para que cualquier intento de invasión de Taiwán sea “demasiado costoso”. En cuanto a Rusia y Ucrania, Rubio llamó a una “diplomacia audaz” que exija concesiones mutuas para poner fin al conflicto.

En América Latina, la atención se centra en Cuba y Venezuela, con propuestas para revertir las concesiones hechas por la administración Biden y fortalecer sanciones económicas.

Una economía global al borde del cambio

Con aranceles dirigidos tanto a aliados como a rivales estratégicos, el regreso de Trump podría marcar una nueva era de incertidumbre en el comercio global. Si bien las empresas multinacionales tienen cierta flexibilidad para adaptarse, las pequeñas y medianas empresas están particularmente expuestas a los costos adicionales y a la volatilidad de los mercados.

“En este entorno, la certidumbre y el estado de derecho son más importantes que nunca para atraer inversiones y mantener la competitividad”, señala un informe reciente de la OCDE.

La pregunta ahora es si las medidas proteccionistas de Trump, combinadas con los esfuerzos de cooperación de figuras como Marco Rubio, lograrán equilibrar los intereses estadounidenses con la estabilidad del sistema comercial global. Los próximos meses serán decisivos para determinar el impacto real de estas políticas en México y el resto del mundo.