ASF observa 159 millones de pesos en la cuenta pública de Torreón

¿Procedimiento rutinario o señal de alerta?

Torreón, Coahuila.

La Auditoría Superior de la Federación (ASF) ha puesto la lupa sobre las finanzas de Torreón, detectando observaciones por 159 millones de pesos correspondientes a la Cuenta Pública 2023. Según el tesorero municipal, Óscar Luján Fernández, se trata de un procedimiento rutinario que sigue el curso esperado, pero ¿realmente son normales observaciones por montos tan elevados?

Luján Fernández aseguró que ya se entregaron todos los soportes requeridos para aclarar el uso de los recursos señalados y que estos procesos forman parte del ciclo de auditoría habitual. «Son resultados preliminares de la ASF, nos revisaron el Ramo 28 y desde la semana pasada personal de Contraloría y Tesorería acudió a la Ciudad de México a llevar los soportes que estaban solicitando», mencionó el funcionario.

El Ramo 28, explicó, se refiere a las participaciones federales que el Municipio recibe y que, en este caso, están relacionadas con transferencias a organismos públicos descentralizados (OPD’s) como el Sistema Integral de Mantenimiento Vial (SIMV), el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) Torreón y el Instituto Municipal de la Mujer (IMM).

Observaciones administrativas… pero, ¿y la magnitud del monto?

El tesorero aseguró que las irregularidades señaladas son de carácter administrativo, como pólizas sin firma o documentación faltante, y que la mayoría de estos detalles ya fueron aclarados. «Son solo cuestiones de forma, que sin embargo tienen que ser aclaradas», comentó.

Sin embargo, el monto observado no es menor. 159 millones de pesos es una cifra que despierta preguntas, especialmente cuando el proceso de revisión podría extenderse hasta finales de año. «Tenemos toda la confianza de que todo quedará aclarado, como ha sido en anteriores ocasiones», afirmó el tesorero.

El funcionario minimizó la situación al señalar que Torreón, al manejar un presupuesto considerable, es sujeto de revisiones constantes por parte de la ASF. “Es un tema de ocupación y no de preocupación”, dijo, asegurando que las observaciones son comunes en municipios de gran tamaño y que se solventarán sin dificultades.

Pero, si estas observaciones son parte de un proceso rutinario, ¿por qué cada año aparecen nuevas revisiones sobre el uso de recursos públicos? ¿Hasta qué punto se trata de un ejercicio de control financiero y en qué momento podría ser una señal de alerta?

En el escenario nacional, la ASF ha señalado irregularidades millonarias en distintos niveles de gobierno, y aunque muchas veces estas se solventan sin mayor problema, otras terminan revelando malos manejos financieros que rara vez tienen consecuencias.

Por ahora, la administración municipal asegura que todo está en orden. Queda por verse si realmente este proceso terminará sin más cuestionamientos o si, como ha sucedido en otras ocasiones, las dudas sobre el uso de los recursos públicos persistirán.